Trenes de París a Disneyland ParisDesde € 5.00

¿Te has preguntado cómo es viajar de la ciudad de la luz a la tierra de la magia en tren? La ruta de París a Disneyland Paris es una aventura que comienza en la vibrante capital de Francia y te lleva directo al corazón de la diversión y la fantasía. El viaje más corto dura apenas 35 minutos, convirtiendo este trayecto en una opción rápida y eficiente para comenzar tu aventura mágica.

La estación de salida en París es la icónica Gare de Lyon, conocida por su impresionante arquitectura y su reloj, que se ha convertido en un símbolo de la ciudad. Desde aquí, el tren se desliza por el paisaje francés hasta la estación Marne-la-Vallée/Chessy, ubicada a las puertas de Disneyland Paris. Esta estación es famosa por su cercanía a la entrada del parque, permitiéndote pasar de la realidad al sueño en solo unos pasos.

En el trayecto no se atraviesan ciudades o pueblos importantes, ya que la ruta está diseñada para ser lo más directa posible, enfocándose en llevarte a tu destino rápidamente. Esto significa que, en lugar de paradas adicionales, podrás disfrutar de una vista continua del cambiante paisaje francés, desde los urbanos horizontes de París hasta las verdes y pacíficas vistas cercanas a Disneyland Paris.

El objeto más icónico que presenciarás al inicio de tu viaje es, sin duda, el reloj de la Gare de Lyon en París, mientras que tu llegada será marcada por la vista de la entrada del parque, prometiendo aventuras y momentos inolvidables.

En resumen, viajar de París a Disneyland Paris en tren es una experiencia rápida, cómoda y llena de anticipación. Desde el emblemático reloj de la Gare de Lyon hasta la mágica entrada de Disneyland, este viaje es el preludio perfecto a una aventura inolvidable en el parque más mágico de Europa.

¿Alguna vez te has preguntado cómo sería recorrer las calles de una de las ciudades más icónicas del mundo? París, la capital de Francia, ofrece no solo una inmersión en la rica historia europea y obras arquitectónicas que desafían el tiempo, sino también una experiencia gastronómica inolvidable. Descubramos juntos los tesoros que esta ciudad tiene para ofrecer.

El primer lugar en nuestra lista es la Torre Eiffel. Esta maravilla de la ingeniería no solo proporciona vistas panorámicas de París, sino que también es un símbolo reconocido mundialmente de Francia. Asegúrate de visitarla tanto de día para disfrutar la vista como de noche para ver su espectáculo de luces.

A continuación, el Museo del Louvre es parada obligatoria. Hogar de la Mona Lisa y la Venus de Milo, este vasto museo ofrece un viaje a través de la historia del arte mundial. Para evitar las largas colas, considera comprar tu boleto con antelación.

La Catedral de Notre Dame, con su fascinante arquitectura gótica, es otro sitio que no puedes perderte. Aunque está parcialmente cerrada por restauración, su exterior sigue siendo impresionante.

Para una experiencia más tranquila, pasea por las orillas del Río Sena. Los cruceros fluviales ofrecen una perspectiva única de la ciudad y son perfectos al atardecer.

El Barrio de Montmartre te espera con sus calles empedradas y el emblemático Moulin Rouge. La Basílica del Sagrado Corazón, ubicada en la cima de la colina, ofrece una de las mejores vistas de París.

No puedes dejar París sin visitar el Palacio de Versalles. Este impresionante ejemplo de la arquitectura barroca francesa te transportará a la época de la realeza francesa.

Finalmente, el Barrio Latino, conocido por su ambiente bohemio, es el lugar perfecto para explorar pequeñas librerías, cafés y la histórica Universidad de la Sorbona.

En cuanto a la gastronomía, no te vayas sin probar un crêpe en uno de los muchos puestos callejeros, o disfruta de un clásico croissant en una acogedora cafetería. París está llena de sabores esperando ser descubiertos.

Recorrer París es como caminar a través de un libro de historia vivo, con capítulos que se revelan en cada esquina. Ya sea maravillándote ante la arquitectura, sumergiéndote en el arte o saboreando la exquisita cocina, París promete una aventura inolvidable en cada visita.

¿Alguna vez te has preguntado cómo sería combinar la magia de Disneyland Paris con la riqueza histórica y arquitectónica de Francia? Este destino no solo es el sueño de todo niño y adulto por sus parques temáticos sino también un punto de partida excepcional para descubrir tesoros culturales inigualables. Aquí te guiamos para que tu viaje sea una experiencia inolvidable.

Empezando por el corazón de la magia, Disneyland Paris en sí, es más que un parque de atracciones; es un espacio donde la fantasía de Disney cobra vida. Pero más allá, Marne-la-Vallée, la ciudad que alberga este reino encantado, está rodeada de sitios fascinantes.

Palacio de Versalles: Majestuosa residencia de reyes franceses. Su arquitectura y sus jardines son espectaculares. Ubicación: Versalles, a una hora de Disneyland. Abierto todos los días excepto los lunes, la entrada general cuesta alrededor de 20€.

Catedral de Notre-Dame: Ícono del arte gótico, esta catedral es un símbolo de París. Aunque actualmente está en restauración, su contemplación exterior sigue impresionando. Ubicada en el corazón de París.

Museo del Louvre: Hogar de la Mona Lisa y miles de obras de arte. Es el museo más grande y visitado del mundo. Entrada general por 15€. Situado en el centro de París, abre todos los días excepto los martes.

Torre Eiffel: Emblemática de Francia, ofrece vistas inigualables de París. Situada en el Champ de Mars, la entrada para subir cuesta desde 10,40€ hasta 25,90€.

Sagrado Corazón de Montmartre (Sacré-Cœur): Basílica situada en la cima de la colina Montmartre, ofrece una de las mejores vistas panorámicas de París. Entrada gratuita.

Barrio Latino: Famoso por su ambiente bohemio, lleno de librerías, cafeterías y ruinas romanas. Ideal para pasear y experimentar el espíritu joven de París.

Sainte-Chapelle: Capilla gótica conocida por sus impresionantes vitrales. Ubicación: Isla de la Cité, París. Entrada alrededor de 10€.

En cuanto a la gastronomía, no puedes dejar Disneyland Paris sin probar los clásicos crepes franceses, el queso Brie de Meaux, tan característico de la región, y, por supuesto, una visita a cualquiera de las panaderías locales para degustar un croissant recién horneado.

Recorrer Disneyland Paris y sus alrededores es sumergirse en un cuento de hadas donde cada esquina cuenta una historia, cada plato revela una tradición y cada monumento desvela siglos de historia. La magia de Disney y el encanto de la cultura francesa te esperan para vivir una aventura sin igual.